La revista escolar “El Espía” del Colegio Nº 742 nació en el año 2003, en el marco del espacio curricular “Comunicación” a cargo de Claudia Cuneo y se pudo realizar con la participación del profesor de computación Juan Carlos Reyes, encargado desde entonces del diseño. En el año 2006 y con motivo de las titularizaciones, la docente es reemplazada en el cargo pero la revista continua en pie y presentándose en sociedad, a través de la nueva titular de “Comunicación”, la profesora María Eugenia Huinchulef. En 2009 se abre el abanico de participantes y se presenta un proyecto conjunto que integran los docentes Natalia Nievas, Estela Chaves, Juan Carlos Reyes y Claudia Cuneo, con el fin de seguir acercando a la comunidad educativa y general, las producciones escolares de los alumnos del Colegio del barrio Las Orquídeas.
La historia de esta publicación surge básicamente a propósito de una invitación cursada por el Programa “El diario como recurso educativo”, que dirigen Liliana Peralta y Laura Morón en el Diario Crónica, para que participemos con nuestro producto en las jornadas que se realizarían el 5 y 6 de septiembre de ese año en el marco de la Primera Muestra de Periódicos Escolares.
Nace la propuesta y entonces es necesario buscar un nombre para la revista escolar, de entre varias propuestas realizadas por aquellas promociones de 2003 se proponen diversas nombres, aunque finalmente por votación mayoritaria emerge el nombre de “El Espía”. Entendíamos que el nombre debía ser consensuado y por eso se puso a consideración de los alumnos a partir de las siguientes sugerencias como:
De buena fuente
Magazín Informativo
El vocero
Diario Express
El dato
El espía
El Informativo
Desde su primera edición la intención siempre fue publicar las producciones que los alumnos realizan en las distintas áreas curriculares, de modo de potenciar su veta creativa y por el otro, poder compartir esta experiencia con la comunidad barrial, integrándolos desde la lectura. Pero este año a partir de la existencia de mayores recursos materiales es posible incluso observar en sus paginas un numero mayor de registros fotográficos, ya que la Escuela cuenta con elementos para poder realizar esta tarea, a diferencia de lo que sucedía en 2003 donde pensar en una cámara digital era una utopía para una institución que recién se empezaba a consolidar en la orientación de “Comunicación, Arte y Diseño”. Sus primeras ediciones fueron muy artesanales, ensambladas a mano y con pocas posibilidades de repartirlas gratuitamente ya que los recursos existentes no nos permitían regalarlas, pero con el paso del tiempo y la experiencia logramos incrementar la edición e incluso en varias muestras de los últimos años llegar a venderlas por un valor simbólico de $ 2, debido al interés que despertaba en los visitantes al stand que querían tener un ejemplar, ya que venían delegaciones de Santa Cruz y del interior del Chubut a participar de este evento.
Como vemos con los chicos en distintas materias, ejercer el derecho a la información incluye entre otros aspectos, tener la posibilidad de dar a conocer nuestras ideas y opiniones. De hecho, pocas veces tenemos esta oportunidad, salvo que escribamos una carta de lectores, llamemos por teléfono a una radio o publiquemos una solicitada en el diario. Así, cada chico fue hablando del tema que quería, por grupo o de manera autónoma y plasmo en un pequeño articulo una idea, un pensamiento, un deseo… que hizo saber a otros usando este recurso escolar y así su sentir quedo plasmado en las hojas amarillas de las primeras revistas que se conservan todavía.
Esta tarea que lleva seis años de continuidad requiere de la participación de muchas personas que trabajen en forma organizada y solidaria, con constancia y dedicación. Aunque los grandes diarios funcionan con una estructura mucho más compleja que la de un periódico escolar, conocer como se trabaja en ellos nos puede dar una idea de cómo organizar las tareas para optimizar los resultados. En la práctica, lo hemos construido con una computadora y algunos materiales sencillos también porque así también es posible producir un periódico.
La cantidad de páginas estipuladas fue de 16 en principio, y en ellas se incluyeron distintas secciones como Deporte, Humor, Actualidad, Notas de Color, Medios de Comunicación e Información General y hoy en día, en su sexta edición “El Espía” mantiene inerte su semblanza, mostrar que hacen los chicos en las aulas, que piensan, que les gusta, como ven la vida, que sueñan, que esperan del futuro… y nosotros los acompañamos en ese proceso y los incentivamos a que dejen en estas paginas registro de su paso por esta institución que los ha visto crecer y pronto los vera partir.
Magazín Informativo
El vocero
Diario Express
El dato
El espía
El Informativo
Desde su primera edición la intención siempre fue publicar las producciones que los alumnos realizan en las distintas áreas curriculares, de modo de potenciar su veta creativa y por el otro, poder compartir esta experiencia con la comunidad barrial, integrándolos desde la lectura. Pero este año a partir de la existencia de mayores recursos materiales es posible incluso observar en sus paginas un numero mayor de registros fotográficos, ya que la Escuela cuenta con elementos para poder realizar esta tarea, a diferencia de lo que sucedía en 2003 donde pensar en una cámara digital era una utopía para una institución que recién se empezaba a consolidar en la orientación de “Comunicación, Arte y Diseño”. Sus primeras ediciones fueron muy artesanales, ensambladas a mano y con pocas posibilidades de repartirlas gratuitamente ya que los recursos existentes no nos permitían regalarlas, pero con el paso del tiempo y la experiencia logramos incrementar la edición e incluso en varias muestras de los últimos años llegar a venderlas por un valor simbólico de $ 2, debido al interés que despertaba en los visitantes al stand que querían tener un ejemplar, ya que venían delegaciones de Santa Cruz y del interior del Chubut a participar de este evento.
Como vemos con los chicos en distintas materias, ejercer el derecho a la información incluye entre otros aspectos, tener la posibilidad de dar a conocer nuestras ideas y opiniones. De hecho, pocas veces tenemos esta oportunidad, salvo que escribamos una carta de lectores, llamemos por teléfono a una radio o publiquemos una solicitada en el diario. Así, cada chico fue hablando del tema que quería, por grupo o de manera autónoma y plasmo en un pequeño articulo una idea, un pensamiento, un deseo… que hizo saber a otros usando este recurso escolar y así su sentir quedo plasmado en las hojas amarillas de las primeras revistas que se conservan todavía.
Esta tarea que lleva seis años de continuidad requiere de la participación de muchas personas que trabajen en forma organizada y solidaria, con constancia y dedicación. Aunque los grandes diarios funcionan con una estructura mucho más compleja que la de un periódico escolar, conocer como se trabaja en ellos nos puede dar una idea de cómo organizar las tareas para optimizar los resultados. En la práctica, lo hemos construido con una computadora y algunos materiales sencillos también porque así también es posible producir un periódico.
La cantidad de páginas estipuladas fue de 16 en principio, y en ellas se incluyeron distintas secciones como Deporte, Humor, Actualidad, Notas de Color, Medios de Comunicación e Información General y hoy en día, en su sexta edición “El Espía” mantiene inerte su semblanza, mostrar que hacen los chicos en las aulas, que piensan, que les gusta, como ven la vida, que sueñan, que esperan del futuro… y nosotros los acompañamos en ese proceso y los incentivamos a que dejen en estas paginas registro de su paso por esta institución que los ha visto crecer y pronto los vera partir.
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